Segundo episodio de la trilogía iniciada en Eleni (04), sobre el destino del helenismo a través de la relación entre dos personas que se conocieron siendo niños en 1919 y que se vuelven a encontrar en distintas ocasiones y en distintas partes del mundo, rodeados por los acontecimientos históricos del siglo XX y el comienzo del XXI.
Bella creación dramática, que mantiene la línea melódica que la compositora aplicara en la primera entrega, con unas músicas intimistas, plácidas y elegantes, de cierto tono afligido, y un tema principal muy sentido.