A un sicario y un médico que trabajan para un cártel del narcotráfico se les entrega una niña, hija del jefe de una banda rival, a quien tendrán que custodiar hasta que reciban la orden de cortarla en pedazos o dejarla en libertad.
Banda sonora con música oscura, moderadamente siniestra, en la que se destaca el empleo de guitarra y percusiones, con orquesta de cuerda para recrear el entorno de violencia, en tanto el acordeón es contrapunto delicado y dramático que finalmente es quien gana el combate. Incluye canciones mexicanas.