Narra la historia real de una anciana que aparcó su furgoneta al lado del camino de entrada de la casa del dramaturgo Alan Bennett y se quedó a vivir en ella durante quince años.
El compositor aplica una sencilla y amable banda sonora para lo sentimental y la comedia. Tiene como tema principal un vals para la protagonista, melodía que la dota de cierta picardía y desenfado, pero también ternura. El resto de la creación es más dispersa y menor.