En Detroit, comienzan a aparecer asesinados sacerdotes y monjas, con un rosario negro en las manos. Un sacerdote colabora con la policía en la investigación, pero a la vez debe mantener el secreto de confesión del criminal.
Partitura dramática, uno de cuyos temas (una dulce melodía a piano) fue escrito por Bobby Laurel y que en el resto el compositor se decanta por establecer un tono íntimo, discreto, que ahonda en elementos psicológicos tanto turbadores como melancólicos, con bello tema principal.