Con un delicioso, bello, elegante y dócil comienzo, en el que una sección de cuerdas se emplea para dar paso a una melodía nostálgica, dramática y cotidiana, Krishna Levy nos proporciona aquí una partitura que podría haber dado mucho más de sí pero que acaba por ser poco efectiva y poco interesante musicalmente.

Canciones francesas con un poco de locura en ellas, otras con una belleza impresionante (como "Message Personnel", con una melodía a piano sumamente magnífica) y otras muy estúpidas. Todo esto se une a algún que otro tema de suspense, que si bien tiene alguna referencia aunque mínima a Herrmann, como se comenta en la web, acaba padeciendo de una musicalidad rutinaria y todo el conjunto acaba por ser insulso y además poco efectivo con las imágenes.
En otras ocasiones, se emplean músicas más dramáticas y temas mucho más tristes para algunas escenas que no lo son por lo que saca un poco al espectador. De todas maneras, esta película, cuyo objetivo es el de simular una obra de teatro, pretende precisamente exagerarlo todo en cierta medida así que la música acaba siendo acertada, excepto algunas veces.

Se destaca el tema principal por encima de todo, con algunas variaciones a piano y otras misteriosas, y narrativamente funciona bastante bien. El resto de la partitura acaba siendo repetitiva y un poco aburrida, acompañando las imágenes de manera exagerada o muy débil, pero pocas veces llegando al punto medio o exacto. No es mala música pero tampoco es un correcto guión musical.

5/10

A destacar solo alguna canción de las varias que hay y sobre el score posiblemente el tema del comienzo. Pobre en su conjunto.